Fondos de Ensueño



....

Friday, August 22, 2014

Me, Prodigal Son?


Almost everyone in this world know parable of prodigal son but rarely see ourselves in it because it relates to a quarrelsome son who has squandered his inheritance. That really doesn’t have to do with us but there are many circumstances in which we become like prodigal son. How often receive a large sum of money from our parents and spend recklessly disregarding that most mortals have to work long time to build that kind of money. How often going in search of our dream we drag our kin toward bankruptcy. How many times we crashed with failure dragging with us the possibilities of our family and our associates! Wastage and failure are very similar because bankruptcy is always the same regardless of how we come to it.
There is a common deficiency in all who fall into bankruptcy; moderation and also is a common mistake in all of them; spending on superfluous even though we know we should not. Many adults retain children's attitudes as far as to money is concerned until a strong economic blow makes us change our attitude. Sometimes that punch comes too late for us to achieve through it.
When we speak of moderation generally define it as ability to be restrained on spending or acting. Its correct meaning goes far beyond that. Who is moderate is disciplined. Moderate have dreams he expects to achieve like all mortals, but plans his triumph. Make a list of what is required to achieve his goal and collects everything needed starting with money before running towards goal. If he needs your help; moderate tells you his plans and asks you to embark with him in the boat of his dreams. He never crawl us towards them.
When moderate fails impact is slight and due to how hard he has worked on planning shame is deep. Dreamer instead runs home without a second thought because he knows he will be greeted with the same love that prodigal son was received. If you ask me which one is better I would say moderate is more likely to achieve the goal since he has a tool box filled with everything needed but the feeling of one who fails in these conditions is so deep it is hard to beat. There must be a half way between the two, that who finds it can succeed or fail without involving his self-esteem because he knows did his best to achieve it. Both success and failure belong to him entirely and can run home to celebrate or mourn; there is nothing to be ashamed on it.
Dreaming is part of life; dream whatever you want but plan a little. Dreams only bring joy when they are reached.

 

 
El Hijo Prodigo
Casi todos en este mundo conocemos la parábola del hijo prodigo pero pocas veces nos identificamos con el puesto que se refiere a un hijo pendenciero que ha dilapidado su propia herencia. Eso no tiene realmente que ver con nosotros pero hay muchas circunstancias en las que llegamos a ser como el hijo prodigo. Cuantas veces recibimos una buena suma de dinero de nuestros padres y la gastamos irresponsablemente sin tener en cuenta que la mayoría de los mortales tienen que trabajar largo tiempo para acumular esa cantidad de dinero. Cuantas veces persiguiendo nuestro sueño arrastramos a los nuestros hacia la banca rota. Cuantas veces nos estrellamos con el fracaso llevándonos con nosotros las posibilidades de nuestra familia y nuestros socios! El despilfarro y el fracaso se parecen porque la banca rota siempre es la misma independientemente de cómo hayamos llegado a ella.
 
Hay una carencia común en todos los que caen en la banca rota; la moderación y hay una error común también en todos ellos el gastar en lo superfluo aun cuando sabemos que no debemos hacerlo. Muchos adultos conservamos actitudes infantiles en lo que al dinero se refiere hasta que un fuerte golpe económico nos hace entrar en razón. A veces ese golpe nos llega demasiado tarde como para que logremos superarlo.
Cuando hablamos de moderación generalmente la definimos como la habilidad de ser comedido al gastar o al actuar. Su correcta acepción va mucho más allá de eso. Quien es moderado es previsivo. El moderado tiene sueños que espera alcanzar como todos los mortales, pero el planifica su triunfo. Elabora una lista de lo que se requiere para lograr su meta y acumula todo aquello que necesita empezando por el dinero antes de correr hacia la meta. Si el moderado necesita de ti te cuenta sus planes y te pide te embarques con él en el bote de sus sueños no te arrastra hacia ellos.
Cuando el moderado fracasa el impacto es leve y dado que trabajo arduamente en la planificación la vergüenza es profunda. El soñador en cambio corre a casa sin pensarlo dos veces porque sabe que será recibido con el mismo amor que fue recibido el hijo prodigo. Si me preguntas cual de los dos es mejor yo diría que el moderado tiene mayores posibilidades de lograr la meta puesto que tiene la caja de herramientas repleta con todo lo necesario pero el sentimiento que embarga a alguien que fracasa en esas condiciones es tan profundo que es difícil de superar. Debe haber un punto intermedio entre los dos, quien lo halla pueden triunfar a fracasar sin que ello involucre su autoestima puesto que sabe bien que dio lo mejor de sí para lograrlo. Ambos, triunfo y fracaso le pertenecen por entero y puede correr a casa a celebrar o a llorar, no hay nada de qué avergonzarse en ello.
Los sueños son parte de la vida. Sueña cuanto quieras pero planifica un poco. Los sueños solo se disfrutan cuando se los alcanza.  

No comments:

Post a Comment