Luke16:13 is one of the many scriptures that have
suffered changes when translated into most languages. Although text refers to
worship of Mammon the money and richness’ god his name has been translated as
money in nearly all languages and text has been used to
refer to greed.
Although it’s true we can
apply it to greed because one need to be greedy to invoke gods in search of
economic welfare, it is also true the text has been used in many places to tell us we should not try to get our
own economic welfare.
Frankly, I think what we are taught through it must be
applied according to economic circumstances of each country. Much has been said
about keeping us out of debt, not getting credit cards and always buy cash but
in third world countries people do not live abundance of rich countries. Wages
of a worker and many professionals do not even worthy enough to eat and the
whole family has to work to cover basic expenses.
In third world buying a home is so onerous that credit
is the only way to get it and cars cost as much as a house. Public health
services are so bad and private hospitals so expensive that only who have a
credit card is entitled to health and in countries with currency exchange
control the only way to get dollars is through an international credit card.
Being a devout Christian becomes then a sword of
Damocles over the head. Disobeying or living in misery that is the dilemma. See
how life pass in front of you without getting chances to crown your dreams that
is the expectation. Worst part of whole thing is that those who seek it to the
members of church have all the comfort their credit cards can pay while their
devotees lack of everything. In some churches leaders do even enjoy comfort
taken from other members.
I have never forgotten a neighbor I had in my early
years of marriage; she was daughter of a preacher who often traveled to attend
conferences of their religion. In one of his trips a hunter repented of killing
animals for pleasure gave him some tiger skins and my friend made spectacular
chairs with them. On another occasion some fishermen gave him pearls they had
taken out sea and my neighbor asked me to make her a necklace with them. Preacher's
daughter was spending her life on enjoying the contrition of her father’s
parishioners.
Wish for the economic welfare of your family is not
greed. Doing what you can honestly do to achieve that welfare is not a sin. Sin
is to let your family starve or die of any illness to avoid debt. Sin is to let
your child's dreams drown down the drain for not acquiring credit cards. Sin is
bringing children into world to live in misery.
Greed is to have more than you need and hoard rather
that spend it on your own comfort, not practicing charity and worked to death
to have more and more.
Being able to go to bed with a serene mind because we
owe nothing is delicious but knowing we can afford the best doctors, best
schools and everything our children need is simply exquisite.
I'm not telling you what to do; I leave it to your
choice. You know your geographic, political and economic circumstances better
than me. Just wanted you to know you have right to dream and trying to turn
those dreams into reality is lawful. God does not expect you to starve in his
name.
¿Es
Pecado La Codicia?
Lucas16:13 es una de las
muchas escrituras que han sido mal traducidas en la mayoría de los idiomas. Aun
cuando el texto original alude a la adoración de Mammon el dios del dinero y la
riqueza se le ha traducido como dinero en casi todos los idiomas y se ha
utilizado la escritura para referirse a la codicia.
Si bien es cierto que
podemos aplicarla a la codicia porque es necesario ser codicioso para invocar
dioses ajenos en busca de bienestar económico, también es cierto que la
escritura ha sido usada en muchos lugares para indicarnos que no debemos
procurar nuestro bienestar económico.
Si he de ser franca yo
creo que lo que a través de ella se nos ha enseñado debe ser aplicado de
acuerdo a las circunstancias económicas de cada país. Mucho se nos ha dicho de
no contraer deudas, no obtener tarjetas de crédito y comprar siempre al contado
pero en los países del tercer mundo no se vive la abundancia de los países
ricos. El salario de un obrero y de muchos profesionales ni siquiera alcanza
para comer dignamente y toda la familia debe trabajar para cubrir los gastos
básicos.
En el tercer mundo comprar
una casa es tan oneroso que solo a crédito se puede obtener y un carro cuesta
tanto como una casa. Los servicios de salud públicos son tan malos y los
hospitales privados tan costosos que solo el que tiene una tarjeta de crédito
tiene derecho a la salud y en los países con control de cambio de la moneda la
única manera de obtener dólares es a través de una tarjeta de crédito
internacional.
Ser devoto cristiano se
convierte entonces en una espada de Damocles sobre la cabeza. Desobedecer o
vivir en la miseria ese es el dilema. Ver la vida pasar frente a ti sin poder
coronar tus sueños es la expectativa. Lo más grande de todo el asunto es que
quienes piden esto a los miembros de la iglesia tienen todo el confort que sus
tarjetas pueden pagar en tanto que sus devotos carecen de todo y en algunas
iglesias incluso gozan del confort arrebatado a otros miembros.
Nunca olvido una vecina
que tuve en mis primeros años de casada, ella era hija de un pastor que a
menudo viajaba para asistir a congresos de su religión. En uno de sus viajes un
cazador arrepentido de haber matado animales por placer le entrego unas pieles
de tigre y mi amiga hizo unas sillas espectaculares con ellas. En otra ocasión
unos pescadores le dieron las perlas que habían arrebatado al fondo del mar y
mi vecina me pidió que le hiciera un collar con ellas. La hija del pastor iba
por el mundo gozando del arrepentimiento de los feligreses de su padre.
Desear el bienestar
económico de la familia no es codicia. Hacer aquello que honestamente se puede
hacer por alcanzar ese bienestar no es pecado. Pecado es dejar que tu familia
muera de hambre o enfermedad para no contraer deudas. Pecado es dejar que los
sueños de tu hijo se escurran por el drenaje para no adquirir tarjetas de
crédito. Pecado es traer hijos al mundo para que vivan en la miseria.
Codicia es tener más de lo
necesario y atesorarlo en lugar de gastarlo en nuestro propio confort, no
practicar la caridad y trabajar hasta morir para tener cada vez más.
Poderse ir a la cama con
la mente serena porque nada debemos es delicioso y saber que puedo pagar los
mejores doctores, las mejores escuelas y todo lo que mis hijos necesitan es
sencillamente exquisito.
No te estoy diciendo que
hacer, lo dejo a tu libre elección. Tú conoces tus circunstancias geográficas,
políticas y económicas mejor que yo. Solo quiero que sepas que soñar está bien
y que tratar de convertir esos sueños en realidad es lícito. Dios no espera que
mueras de hambre por amarle.
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