Fondos de Ensueño



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Thursday, September 27, 2012

Prayer Comes From Soul


Prayer is how man communicates with God. There are several kinds of prayer:
Ritual or repetitive which is used to perform a rite or ordinance; example of it is the blessing of water and the blessing of bread during communion. They cannot be modified but are repeated as they were written and are read directly from the text to ensure that no mistakes are made in some religions and in others priest must memorize the whole text.
Patriarchal used to perform ordinances such as the blessing of the ill and anointing the dead. These contain a body construction that must be followed to the letter but priest adds, depending on the nature of the blessing, the words that give individual value to prayer and that words are the blessing the person receives.
Personal prayer containing a scheme where invocation occurs first, then the recognition, after comes the asking or begging, and finally the closing but is free construction. Words are a choice of the speaker.
Corporate prayer is equal to the personal prayer but is made on behalf of a group or congregation, this category includes family prayer.
Prayer of the soul is done in cases of desperation, in it speaker only invokes God and asks for something. Example of it is the "Lord help me" we emit when we are in danger. This is the most fervent prayer that man makes, born out of soul without neither planning nor beautifying words.
In first category only thing that counts is dignity of priest and blessing is effective; second requires faith in addition to dignity of priest. He must know in his heart with no doubt, he can perform a miracle. For all other prayers the only thing required is faith of the speaker.
It is generally said that we should pray at the time we wake up, before meals and before going to bed plus family prayer in the morning and at night. Seven daily prayers make our praying turn into a litany where prayer after prayer we do always say the same things and come to feel our words are vain.
An important religious leader was traveling to another country with his team, which had recently added a new member who noticed at lunch time President did not gathered for a collective prayer and asked hopping to be included; “Mr. President, don’t you pray?” to which president replied: “-No”
Then the new member said, “Sir I have noticed three times already that you do not pray” and the leader replied “-I led Lord always in my heart”
What I'm trying to illustrate with this story is that the amount of prayers we performed throughout the day is not what is important but what we feel when we pray.
If you want your prayers to be really effective, always pray from the bottom of your heart, with real intent, not beautifying words to pass as scholar or devotee. If you spend all day at work and just pray in the morning and evening include blessing of the food you will consume in the day in your morning prayer.
Prayer is an act of faith, don’t pray if you don’t really want to, keep in mind that intention of the heart is what counts and Lord knows your heart and knows if you are being sincere.

 

La Oración Del Alma Es
La oración o plegaria es, generalmente, la manera en que el hombre se comunica con Dios. Hay varias clases de oración:
La ritual o repetitiva que se utiliza para efectuar un rito u ordenanza; ejemplo de ella son la bendición del agua y la bendición del pan durante la santa cena. Estas no pueden ser modificadas sino que se repiten tal cual fueron escritas y son leídas directamente del texto para garantizar que no se cometan errores, en algunas religiones y en otras el sacerdote debe memorizar la totalidad del texto.
Las patriarcales que se utilizan para efectuar ordenanzas como la bendición de los enfermos y la unción de los muertos. Estas contienen un cuerpo constructivo que debe ser seguido al pie de la letra pero el sacerdote añade, dependiendo de la naturaleza de la bendición, las palabras que darán valor individual a la oración y que son en realidad la bendición que la persona recibe.
La oración personal que contiene un esquema, donde ocurre primero la invocación, después el reconocimiento o agradecimiento, el ruego y finalmente el cierre, pero es de libre construcción. Las palabras son de la elección del orador.
La oración colectiva es igual a la personal pero se efectúan en nombre de un grupo o congregación, en esta categoría se incluye la oración familiar.
La oración del alma se efectúa en casos de desesperación, en ella solo invocamos a Dios y hacemos un ruego. Ejemplo de ella es el “ayúdame Señor” que emitimos cuando nos encontramos en peligro. Esta es la oración más ferviente que el hombre realiza, nace del alma sin hermoseamientos ni palabras rebuscadas.
En la primera categoría lo único que cuenta es la dignidad del sacerdote y la bendición será efectiva. En la segunda además de la dignidad se requiere la fe del sacerdote.  El debe saber sin duda alguna en su corazón que él puede efectuar milagros. Para todas las demás lo único que se requiere es la fe del orador.
En general se dice que debemos orar al levantarnos, antes de las comidas y antes de acostarnos además de la oración familiar de la mañana y la de la noche. Siete oraciones diarias hacen que nuestros ruegos se transformen en una letanía donde oración tras oración decimos siempre lo mismo, acabamos sintiendo que nuestras palabras son vanas.
Un importante líder religioso viajaba a otro país con su equipo de trabajo, en el cual recientemente se había incluido un nuevo miembro quien noto que a la hora de la comida el presidente no los congregaba para una oración colectiva y pregunto con esperanza de ser incluido; “-Señor presidente, ¿no ora?” a lo cual el presidente contesto: “-No”
Entonces el nuevo miembro le dijo, “-Señor he notado ya tres veces que Ud. No hace la oración” y el líder le contesto: “-Al Señor lo llevo siempre en mi corazón”
Lo que intento ilustrar con esta historia es que la cantidad de oraciones que se realizan a lo largo del día no es lo importante sino lo que Ud. Siente al orar.
Si Ud. Quiere que sus oraciones sean realmente efectivas, ore siempre desde el fondo de su alma, con verdadera intención, no hermoseando las palabras para pasar por erudito o devoto. Si Ud. Pasa todo el día en el trabajo y solo ora en la mañana y en la noche incluya en sus oraciones la bendición de los alimentos que consumirá en el día.
La oración es un acto de fe, no ore si no desea realmente hacerlo, tenga siempre presente que la intención del corazón es lo que cuenta y que el Señor conoce su alma y sabe bien si esta Ud. siendo sincero.  

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