About Soul And Peace

I've been wondering what peace is? Some may say peace is absence of war and others may say peace is absence of social violence. Both sides are right in some sense but in a peaceful country there are many who have no peace and life can be unhappy in a city with no crime and; unhappiness is absence of peace.

True peace is rather a climate of soul that a situation happening around us. It doesn’t have to do with what others do but with the way we feel about ourselves. It is a state of satisfaction with our own actions. It's somewhat certainty we have given our best.

Sometimes we think we will cause a little damage to achieve our goals and that's okay because we will be successful but a triumph that steal us the peace of our soul is like a dagger in our head. We cannot enjoy it because we are busy thinking about the way we got it and although it may seem contradictory being always harmless to others can also take away our peace because setting aside opportunities before us to succeed without harming others can make us feel dissatisfied with ourselves which is logical because when paying bills what goes through our head is not the good we are for not stealing opportunities to others but what fools we were that didn’t take advantage of the opportunity we had.

Peace doesn’t have to do with how good we are then but with our certainty that did what was necessary and if it was possible we would have done better. It is also about to be able to accept our time, our bodies and our essence. It’s not worthy to invest time in longing for the past. Opportunities which were left behind are in the past; we cannot go back and do it differently. We can make better decisions based on what we have not to restart again from scratch and it’s not worthy to go crazy trying to hold youth either. Those who do often end up having worse appearance than if they had assumed their age because many of the products used to it cause more harm than good. Accepting ourselves is the clue, assuming ourselves as the human beings we are with our strengths and weaknesses.

This month marked the twelfth year of my mother’s death and I have been remembering how calm she was at knowing that Reaper was riding at full gallop after her. My sisters and I wanted to keep her. We make her face the intense agony of going from one hospital to another in search of healing and torture of the intensive therapy room. Before reaching such a condition that she required intubation she said staring straight ahead. "I will not survive, quit fighting and take me home I want to die in my bed with my daughters around me" but whenever got worst we called for an ambulance.

Many seniors are afraid to die, they fear what will come next because they are not satisfied with the way they lived their lives but my mother was calm. It is not that she hadn’t commit mistakes, in fact she mistaken many times but felt good about everything she did. Her soul was at peace. That’s why I say assuming ourselves as the human beings we are is the clue. Being and knowing that we are instead of pretending to appear as what we are not.

Whoever you are and whatever you do keep peace in your soul.

 

Conservar El Alma En Paz

Me he estado preguntando ¿qué es la paz? Habrá quienes digan que paz es la ausencia de guerra y quienes digan que paz es la ausencia de violencia social. Unos y otros tienen razón en algún sentido pero en un país sin guerra hay muchos que no tienen paz y en una ciudad sin violencia se puede ser desdichado y la desdicha es ausencia de paz.

La verdadera paz es más bien un clima del alma que una situación que ocurre alrededor de nosotros. No tiene que ver con lo que otros hacen sino con la manera en que nos sentimos con nosotros mismos. Es un estado de satisfacción con nuestros propios actos. Es en cierta manera la certeza que hemos dado lo mejor de nosotros mismos.

A veces pensamos que haremos un poco de daño para lograr nuestros objetivos y que eso está bien porque tendremos éxito pero un triunfo que nos roba la paz en el alma es como una daga clavada en la cabeza. No conseguimos disfrutarlo porque estamos ocupados pensando en la manera en que lo conseguimos y ser siempre inocuo para los demás puede también quitarnos la paz aunque parezca contradictorio porque poner a un lado las oportunidades que se nos presentan para alcanzar el éxito porque no queremos dañar a otros puede hacer que nos sintamos insatisfechos con nosotros mismos lo cual es lógico pues a la hora de pagar las cuentas lo que pasa por nuestra cabeza no es lo buenos que somos que no le quitamos la oportunidad a otros sino lo tontos que fuimos que no aprovechamos la oportunidad que tuvimos.

La paz no tiene que ver entonces con que tan buenos somos sino con la certeza que hicimos aquello que fue necesario y que de ser posible lo habríamos hecho mejor. Tiene que ver también con que seamos capaces de asumir nuestro tiempo, nuestro cuerpo y nuestra esencia. No vale la pena invertir tiempo en añorar el pasado. Las oportunidades que se fueron quedaron atrás, no podemos regresar y hacerlo distinto. Podemos tomar mejores decisiones a partir de lo que ya tenemos no empezar otra vez desde cero y tampoco vale la pena enloquecer tratando de retener la juventud. Quienes lo hacen a menudo terminan teniendo peor apariencia que si hubieran asumido su edad con madurez porque muchos de los productos usados para ello causan más daño que bien. Aceptarnos a nosotros mismos es la clave, asumir el ser humano que somos con sus virtudes y defectos.

Este mes se cumplieron 12 años de que murió mi madre y he estado recordando lo serena que estaba sabiendo que la Parca venia cabalgando a todo galope en su busca. Mis hermanas y yo queríamos retenerla. La enfrentamos a la intensa agonía de ir de una clínica a otra en busca de la curación y a la tortura de la terapia intensiva. Antes de llegar a tal condición que requiriera la entubación ella dijo mirándonos de frente. “No me voy a salvar, dejen ya de luchar y llévenme a casa quiero morir en mi cama con mis hijas alrededor de mi”  pero cada vez que se agravaba llamábamos pidiendo una ambulancia.

Muchos ancianos tienen temor de morir, les asusta lo que vendrá después porque no se sienten satisfechos con la manera en que vivieron sus vidas pero mi madre estaba tranquila. No es que ella no haya cometido errores, se equivoco muchas veces pero se sentía bien con cada cosa que hizo. Su alma estaba en paz. Por eso digo que asumirnos a nosotros mismos como el ser humano que somos es la clave. Ser y saber que somos en lugar de pretender parecer lo que no somos.

Seas quien seas y hagas lo que hagas trata de conservar tu alma en paz.