I once met a woman whose husband was used to beating
her brutally without any apparent cause, freed himself of the stress his work caused
him coming home at sunset to beat his family, I also met a girl whose mother
burned her hands with an iron for not having done her homework, and a man who
was terrified of coming home late because his wife would beat him. Although
living in different places the three of them were receiving mistreatment of the
ones who allegedly loved them.
Unrighteous dominion covers a very extensive list of
abuse inflicted on the person by those who should love and respect them. It is a
common practice in almost every society around the world and is the cause of
almost all marital breakdowns. Although sufferers are usually women and
children there are also men who are subjected by their partners.
There are some more subtle ways of submission which not
by being subtle cease to enter into what we call unrighteous dominion. Examples
are:
1. The habit of making decisions on behalf of our
couple or our children with the excuse that they know nothing about it or that
we know better than them what suits them.
2. Forbidding our couple to put makeup on or dress
nice with the excuse that they look better on their natural appearance. I’ll dwell a little here for husbands who do
this often commit adultery and when discovered accuse their partners of not
dressing up, nor taking care of themselves. Once they have at home the scruffy
grapple they created to save money on makeup and wardrobe all other women are
more attractive to them than the one they have at home. Furthermore, this
practice is also common in women who were betrayed and abandoned; this kind of
woman regularly prevents her new husband from dressing appropriately because she
fears to see her history repeated.
3. Deciding which career our children will study
because it suits our interests is also unfair. Each person has his own talents
and abilities and should not be forced to venture into the career of their
parents for they will inherit their business or customers.
I've said before, the best existing book on human
rights is a manual of etiquette and social behavior. Whatever the author,
language and price of that manual are it certainly says that every human being
has the right to exist with his own skills and habits that set him apart from
the rest of humanity.
Nobody has the right to tell us what to do with our
own lives or how to live them. Advice stops being advising when we try to
impose ourselves and choose on behalf of those we love their wardrobe,
vocabulary, activities, etc. From the love I feel for you I can help you
discover which colors go well with your skin and personality, I can explain you
what kind of clothes go well with your weight and body shape but I can never
decide for you the dress you’ll buy.
If I love you I'll let you grow to your own measure and
will, I’ll encourage your efforts to achieve what your dream is instead of
trying to make you live the dream of mine. I'll teach you how to make better decisions
by giving you the power to decide and will lead you to the best way to live up
to the expectations that you have of yourself. Above all I’ll keep clear in my
mind that the life you are trying to live belongs to you. It’s not a gift
neither a loan I gave you. You do not owe me anything.
What I do for you I do it out of the love I feel and
in the name of love and therefore I should not expect any reward.
Note: Even though my intention is not promoting conflicts I
must let you know that there are associations to help those who suffer abuse
all over the world. There is one in your community to which you can go if
that's the case.
¿Ha
Ejercido Alguien Injusto Dominio Sobre Ti?
Conocí en una ocasión a
una mujer cuyo marido la golpeaba brutalmente sin ninguna causa aparente, liberaba
el stress que su trabajo le producía llegando a casa al atardecer a golpear a
su familia, también conocí a una niña cuya madre le quemo las manos con la
plancha por no haber hecho sus tareas; y a un hombre que sentía terror de
llegar tarde a casa porque su mujer lo golpearía. Aunque vivían en lugares
distintos los tres recibían maltratos de quien supuestamente los amaba.
El injusto dominio abarca
una muy amplia lista de maltratos infligidos en la persona por aquellos que
deberían darles amor y respeto. Es una práctica común en casi todas las
sociedades del mundo y es la causa de casi todas las rupturas conyugales. Aun
cuando quienes la sufren son casi siempre mujeres y niños, también hay hombres
que son sometidos por sus parejas.
Hay además maneras más
sutiles de sometimiento que no por ser sutiles dejan de entrar dentro de lo que
llamamos injusto dominio. Ejemplo de ello son:
1. El hábito de tomar
decisiones en nombre de la pareja o de los hijos con la excusa de que ellos no
saben de eso o que nosotros sabemos mejor que ellos lo que les conviene.
2. El prohibirle a la
pareja que se maquille o vista bien con la excusa de que luce mejor al natural
y quiero detenerme un poco aquí porque los esposos que hacen esto a menudo
cometen adulterio y cuando son descubiertos acusan a su pareja de no
arreglarse, de no cuidar de sí misma porque una vez que tiene en casa el garfio
desaliñado que el fabrico para ahorrar dinero en maquillaje y vestuario todas
las demás mujeres son más atractivas para el que la que tiene en su casa.
Además esta práctica es común también en las mujeres que fueron traicionadas y
abandonadas; a menudo esta clase de mujer impide a su nuevo marido vestir
apropiadamente porque teme que la historia se repita.
3. El decidir por nuestros
hijos la carrera que estudiaran porque esto conviene a nuestros intereses
también es injusto. Cada persona tiene sus propios talentos y habilidades y no
debe ser obligada a incursionar en la carrera de sus padres porque heredara el
negocio o los clientes.
Lo he dicho antes, el
mejor libro de derechos humanos que existe es un manual de etiqueta y
comportamiento social. Sea cual sea el autor, idioma y precio de ese manual sin
lugar a dudas dice que todos los seres humanos tenemos derecho a existir con
nuestras propias habilidades y hábitos que nos diferencian del resto de la
humanidad.
Nadie tiene derecho a
decirnos qué hacer con nuestras propias vidas o como vivirlas. Los consejos dejan de ser consejos
cuando intentamos imponernos y elegir en nombre de los que amamos su vestuario,
vocabulario, actividades, etc. Puedo desde el amor que te tengo ayudarte a
descubrir que colores van bien con tu personalidad y tu piel, te puedo explicar
qué clase de ropa va bien con tu peso y la forma de tu cuerpo pero nunca
decidir por ti el vestido que compraras.
Si te amo te dejare crecer
en tu justa medida y a tu antojo, incentivare tus esfuerzos por alcanzar
aquello que tu sueñas en lugar de intentar que vivas el sueño que es mío. Te
enseñare a tomar decisiones dándote el poder de elegir y te guiare hacia la
mejor manera de vivir conforme a las expectativas que tú tienes de ti mismo.
Sobre todo tendré claro que la vida que intentas vivir te pertenece; no te la
di ni te la preste, no me la debes.
Lo que hago por ti lo hago
desde el amor y en nombre del amor y no debo por tanto esperar retribución.
Nota:
Aun cuando mi intención no es fomentar conflictos es preciso que sepas que
existen asociaciones de ayuda para aquellos que padecen maltratos en todas
partes. Hay una en tu comunidad a la cual puedes acudir si ese es tu caso.
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